En realidad no sé que escribir, necesito una infusión de esas, de las de las palabras. se me ha borrado todo lo que he escrito, así que intentaré hacer memoria. empezaba citando a nacho vegas: y juras que no quieres volver a despertar muerta de sed y con un puñal hundido en el pecho. Robo los versos, añadía y entonces re-citaba: y te prometo que si te vuelvo a ver tan hundida trataré de hacer lo imposible por ponerte una sonrisa. Días extraños, de lágrimas tranquilas, fucks escritos en la ventana de mi habitación, risas y cánticos. el otro día aprendí cosas sobre jetuilelle y confié en nosotros. tenemos que ser nosotros, joder. a pesar de todo. a pesar de todo, joder. nos debemos una conversación etílicas, cuando tenga que ser, evidentemente. cada vez más perdida y ensimismada en mi misma mismidad. me enamoro de las chicas que veo desde el autobús conduciendo vespas, con aire de desdén y superioridad. luego las olvido e invento historias con voces cálidas y piel suave. ayer recordé una de un corazón y miles de gatos. reconocer es capicúa, como mi nuevo nombre. para que mi vida se llene de suerte.
el niño de la foto, mi primo Manuel, el otro día me preguntó si era del Madrid o del Barça. Yo le dije que no me gustaba el futbol pero que bueno, me quedaba con el Barça. Él me dijo que era del Madrid y del McDonalds.
